Wednesday, April 20, 2016

Que descansada vida...Por: Ricardo Tribín Acosta

 E  N    M  I    O  P  I  N  I  O  N

Algo que he registrado en mis lecturas y me ha gustado bastante, expresa que “resulta importante aprender a respirar, relajarse, hacer silencio interior y estar en paz, manteniéndose lejos del desasosiego y la ansiedad”, lo cual me trae a colación lo que escribí al comienzo del primero de mis cinco libros “Y como empiezo mi cambio? , adonde recuerdo a Fray Luis de León, famoso por su hermoso poema “Vida retirada”, en el que en la parte inicial recita: ¡Qué descansada vida la del que huye el mundanal ruido y sigue la escondida senda por donde han ido los pocos sabios que en el mundo han sido.


Por ello, cuando el estrés y la ansiedad nos agobien, generalmente por la forma como vemos y asimilamos las cosas, resulta conveniente, como me lo enseñara mi gran maestro Héctor Trujillo Mejía, quien a menudo me hablaba de la necesidad de calmar la mente disputando nuestros pensamientos complejos, logrando de esta manera cambiar la manera de pensar, con miras a buscar una modificación positiva en la forma de sentir y de actuar. 


Precisamente Trujillo escribió en el prólogo de ese, mi primer libro, lo siguiente “De ahí que recordando que las sugeridas metas de Ricardo son la Paz, el Amor y la Serenidad, en esto me trae a mi filósofo de cabecera, Bertrand Russell, quien, aunque libre pensador, lo llegaron a describir como el más místico de los filósofos modernos y que escribió en su autobiografía que tres metas había tenido en su vida: El Amor, el Conocimiento, y la Compasión por los seres humanos y en este último había fracasado. Había tratado sin éxito aminorar el sufrimiento humano.  Yo diría que la obra de Tribín; sin ser religiosa, es fuertemente espiritual.  Tribín es Franciscano con el existencialismo de San Agustín de Hipona, expresado en su concepto del tiempo”. 

http://ricardotribin.blogspot.com 

Miami, Abril 20 de 2016


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